lunes, noviembre 03, 2008

De caídas y otros papelones (I)

Cuando me presenté frente a la comunidad bloggera, afirmé que fuí de golpearme y caerme más de lo que puedo recordar. Me tropiezo en la calle, me resbalo en mi propia cocina y me corto las manos con los ganchitos de la abrochadora en la oficina.
Si alguno que me conoce bien fue detallista y mantuvo la mirada fija en mi rostro, habrá notado que tengo un micro bultito en un labio. En el inferior, para ser precisos. He aquí el relato del primer y más grande papelón de mi vida adolescente:

"Era un baile en el colegio Sagrado Corazón de Jesús. De esos bailes que uno adopta como antesala a las salidas bolicheras posteriores. Era la primer noche que usaba unas botitas tan altas como las que usé aquella vez. Todos nuestros amigos varones de colegios aledaños estaban allí, además de los propios anfitriones (ignotos hasta ese entonces). Bajando las escaleras y haciendome la diva mientras saludaba a la concurrencia, un imberbe de no más de 13 años (los mismos que tenía yo por ese entonces) pasó corriendo a mi lado, provocando una estrepitosa caída, la mía. El DJ de turno cortó la música, la Comisión de Padres prendió las luces y ante el pedido de ayuda medio en broma, medio en serio del mismo DJ, alguien acudió en mi ayuda, mientras yacía semi inconsciente al pie de las escaleras.
Mientras mi boca derramaba las últimas gotas de sangre sobre mi remera BLANCA, sentí que uno de mis amigos gritaba: "¿Quién te pegó Mandy? Lo matamos, quién te pegó?". Sin poder refutar semejante pelotudez e imposibilitada para responder, no tuve más remedio que sentir que otro idiota me gritaba: "Mandu, a quién carajo te apretaste?". Mientras la Comisión de Padres decidía a qué servicio médico llamar y ante mi negativa a ser trasladada a algún nosocomio, mi padre, que venía a buscarme, se ocupó de mí.
Al ver semejante cuadro, y siendo la primera vez que me dejaban asistir a un baile, me miró y me dijo: Ahora, a tu madre, ¿cómo le hacemos entender que esto no pasa en todos los bailes?

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Jajajja
Pobre aquella Mandy!
Yo creo que la moraleja es: no usar tacos tan altos! o mejor no usar tacos (a menos que no haya opcion)
Besosss... hasta el jueves

Anónimo dijo...

jjajajaja q divina!!!

lo bueno de esas cosas es mirarlas a distancias, onda 9 años despues, y reirse mucho mucho mucho...

eso no saca la verguenza del momento, pero capas te prepara un poquito para las q van a venir. Yo tuve varias de esas escenas de papelones multitudinarios, y no se los deseo a nadie, pero bue, seguimos vivos por suerte, y a la espera de la proxima caida jajaja

Saludos Mandy!! Ya no tengo el mismo efecto q cuando andaba por las sombras, pero obvio q voy a seguir pasando por este tan copado espacio

By!

MANDUCHA dijo...

Es cierto, no es el mismo efecto porque ahora lo puedo poner cara a tus lindos comments, pero como me seguís cayendo bien, espero que me sigas visitando VOLANDO BAJO
Besotes!